Cronista Oficial del Real Sitio y Villa de Aranjuez EL RANA VERDE. EL RESTAURANTE DE REFERENCIA EN LA HISTORIA DE ARANJUEZ Cuando se habla de Aranjuez, se recuerda la esencia, lo relevante, lo que quedó impregnado en la retina del visitante mediante el impacto vivido. Es habitual escuchar a muchas personas foráneas cómo ensalzan lugares o escenarios de Aranjuez: el Palacio Real, la Real Casita del Labrador, los jardines, el Concierto de Aranjuez de Joaquín Rodrigo, las pinturas de Santiago Rusiñol y, un restaurante, por aquello del deleite gastronómico. Podía ser cualquiera de los que ofrecen sus mesas, pero hay un restaurante que deja una impronta en los recuerdos de quienes visitan Aranjuez desde hace décadas: “El Rana Verde”.
En cierto modo tiene su lógica, pues es un establecimiento situado en un punto de referencia para propios y foráneos, al pie del puente Colgante o de Barcas, paso obligado del viajero por la carretera de Andalucía largo tiempo atrás, no perdiendo ese aroma acogedor y modesto en todos sus aspectos. En el haber de este internacional restaurante “El Rana Verde” se debe anotar la presencia y atención de la familia al pie del negocio a los gancheros en su llegada a Aranjuez con la maderada, directores, artistas y personal de los desaparecidos Estudios Cinematográficos de Aranjuez, locutores de radio, médicos cantantes, toreros y aristócratas, sin olvidar a los relevantes artistas Joaquín Rodrigo, Salvador Dalí, Rafael Alberti, Federico García Lorca. Y desde sus primeros compases la inevitable presencia del pintor por excelencia del Real Sitio y Villa de Aranjuez: Santiago Rusiñol i Prats que, junto a su esposa Luisa Denis, departieron tertulia diaria en sus veladores con notables amigos de Aranjuez. “El Rana Verde” es un lugar emblemático del Real Sitio y Villa de Aranjuez, enclavado desde hace más de un siglo en un escenario cortesano que se mantiene vivo como el día que lo fundó el Tío Rana. Para situar en el tiempo el origen de esta casa hay que remontarse a comienzos del siglo XX, cuando Tomás Díaz-Heredero Jiménez, conocido popularmente como el Tío Rana, levantó un merendero de madera con las tablas del desaparecido Mercado de Abastos a orillas del río Tajo.
Desde entonces, gracias al esfuerzo, trabajo y calidad ofrecido tanto en sus platos como en la atención al cliente, con su escogido personal hostelero durante sucesivas generaciones familiares, y la supervisión de sus hijas Isidra, Nati, Candelas y Conchita. Una labor que siguieron los hijos de Conchita –nietos del Tío Rana– José Tomás y Joaquín, y desde hace años hasta la actualidad Joaquín y Rosa María junto a Joaquín hijo –biznieto del Tío Rana–, que han conseguido llevar a lo más alto de la gastronomía el nombre de “El Rana Verde” en el panorama nacional e internacional como un exquisito, prestigioso y consolidado restaurante del siglo XXI.
José Luis Lindo Martínez